La mayoría de expertos recomiendan un tratamiento multidisciplinario, el cual consta de una combinación Médica, Educativa, Conductual, e intervenciones Psicológicas. Las intervenciones incluyen modificaciones y adaptaciones educativas, modificación de la conducta, entrenamiento de padres, control y medicación.

Psicoestimulantes como Metilfedinato, Dextroamphetamina y Pemolina (sólo pueden ser prescritos por un Médico) son los medicamentos más usados en el manejo de TDAH. La estadística revela que entre el 70-80% de niños con TDAH responde positivamente a medicamentos Psicoestimulantes. Otros medicamentos (Antidepresivos) y (Antihipertensivos) aumentan la atención y disminuyen la impulsividad, la hiperactividad y la agresión.

El manejo conductual es una de las intervenciones más importantes con niños que tienen TDAH. Dentro de las técnicas más importantes están el reforzamiento positivo, en el que se premia el niño por la conducta deseada.

Él éxito escolar requiere un rango de intervenciones. La mayoría de niños con TDA puede convertirse en TDAH en el salón. Sin embargo se pueden hacer ajustes menores al ambiente, que junto con personal del apoyo adicional y programas diseñados por especialistas tanto fuera como dentro del Áula resultan ser muy útiles. Los más afectados requieren de atención especial, existen escuelas en nuestro país que proporcionan este y otros tipos de apoyo actualmente, así mismo constantemente se están diseñando nuevas alternativas que ya no aíslan a estos niños en grupos especiales y en cambio, se integran a clases regulares de educación personalizada.

Los adultos con TDAH se pueden beneficiar aprendiendo a estructurar su ambiente. Los Medicamentos efectivos en los niños también son útiles con adultos que tienen DA/DAH. El apoyo Profesional es una intervención importante. La Psicoterapia a corto plazo ayuda a los pacientes a identificar cómo puede asociar su invalidez con una historia de éxitos y dificultades en relaciones interpersonales. La Psicoterapia Profunda puede ayudar a aliviar culpas y desilusión.

Le recomendamos los documentos aportados por la Dra. Ana Figueroa en relación con el tratamiento del trastorno.

Se ha realizado cientos de estudios en miles de niños con respecto a los efectos de medicamentos Psicostimulantes, La elaboración de ellos se encuentra entre las más estudiadas en la historia farmaceútica. Y relativamente los efectos secundarios que se han identificado en el largo plazo son mínimos en comparación a los beneficios. La mayoría de los problemas relacionados con estos medicamentos son: reducción del apetito y dificultad para conciliar el sueño. Muy esporádicamente algunos niños experimentan un “rebote del estimulante”- un humor negativo o un aumento en la actividad cuando el medicamento ha sido retirado. La afección mayor se presenta a corto plazo cuando se cambian las dosis o se están nivelando las dosis adecuadas a cada individuo, pueden presentarse problemas con la estatura o aumento de peso, pero los estudios sugieren que esto sucede en raras ocasiones. Unos estudios sugieren que niños con TDAH retardan el inicio de la pubertad, por lo que debe supervisarse la talla y el peso estrechamente.

Un efecto secundario relativamente raro al medicar psicoestimulantes es el que desenmascara “tics latentes” el término médico para movimientos involuntarios psicomotrices, tales como parpadeo, encogimiento de hombros y aclaramiento de la garganta. Los psicostimulantes pueden facilitar la evocación de un “tic de desorden” en individuos susceptibles. A menudo, pero no siempre, el tic desaparecerá cuando se suspenda el medicamento. En algunos adolescentes tics vocales (aclaramiento de la garganta, sensibilidad olfativa, o tos más allá de lo normal) o “tics motrices (parpadeo, muecas faciales, encogimiento de hombros, voltear la cabeza) ocurrirá como un coexistente del fenómeno por tiempo – limitado con TDAH, los medicamentos los evocan mas temprano pero de cualquier forma se presentarían mas tarde o temprano y tienden a desaparecer al final de la adolescencia o cuando el medicamento haya sido retirado.

La decisión de administrar medicamentos (Psicostimulantes) sólo puede hacerla un médico, con el consentimiento de los padres. El tratamiento por consiguiente NO lo puede recetar el personal escolar; sin embargo, los maestros pueden sugerirlo de acuerdo a la experiencia y a los efectos que han observado en otros niños con TDAH.